Cambiar la cerradura de una puerta exterior es fácil si sigues nuestra explicación paso a paso. Es mucho más sencillo que cambiar la cerradura de una puerta blindada.
Guía para cambiar la cerradura de tu puerta exterior paso a paso
Con frecuencia la puerta que más necesita cambio de cerradura es la puerta exterior.

¿Por qué?
Porque son las que más se abren y las que más se exponen a los elementos: frío, humedad, lluvia, nevadas, calor. Incluso puede llegar a romperse la manilla.
Todo esos factores hacen que la cerradura se recienta o que su mecanismo se vea perjudicado.
Eso, sin contar con que, en ocasiones, la cerradura de la puerta exterior es forzada por perpetradores que quieren invadir la propiedad privada.
Por eso no es de extrañar que el forzaje sea una de las principales causas por la cual se necesita hacer un cambio de cerradura en la puerta exterior.

Ya se sabe que existen distintas formas de forzaje de puertas exteriores, sin importar si son puertas de madera, de metal o blindadas estás pueden ser violentadas.
Los perpetradores pueden usar llaves bumping, ganzúas o cualquier otra herramienta para forzar la cerradura y entrar sin nuestro consentimiento.
Una buena forma de evitar estos episodios indeseados es cambiando la cerradura y aquí te decimos cómo.
Lo que se necesita para cambiar cerradura puerta exterior
Las herramientas que necesitas para cambiar una cerradura en una puerta exterior son casi siempre los mismos.
Así que, sin importar que tu puerta sea de madera, de metal, blindada o de alta seguridad, los instrumentos que necesitarás son:
- Cerradura nueva.
- Destornilladores de punta estriada y plana.
- Cepillo de limpieza de cerdas duras.
- Grafito en polvo.

Cambiar cerradura puerta exterior, paso a paso
Ten todas tus herramientas a la mano pues queremos que el proceso de cambiar la cerradura de la puerta exterior sea fluido y sin interrupciones.
Paso 1, destrabamos el picaporte de la vieja cerradura
En este paso nos aseguraremos de retirar los componentes externos de la vieja cerradura como: los picaportes, manijas o pomos, tanto interiores como exteriores, así como las chapas embellecedoras de cada picaporte.
- Abrimos la puerta.
- Desatornillamos el picaporte, la posición de los tornillos de cada pomo varía de puerta a puerta.
- Retiramos el picaporte de ambos lados de la puerta, algunos pueden sacarse halando y otros desenroscando.
- Quitamos las chapas embellecedoras que son las que separan el picaporte de la hoja de la puerta y ocultan parte del mecanismo de la cerradura.

Paso 2, retiramos la vieja cerradura
Una vez que hayamos quitado el picaporte de cada lado de la puerta y sus chapas nos dispondremos a quitar la vieja cerradura.
Algunas cerraduras están fijadas solo con par de tornillos en el canto de la puerta, estos son dos tornillos de cabeza grande, el tipo de destornillador que usarás puede variar.
Otras cerraduras, en cambio, tienen además un segundo grupo de tornillos que debieron quedar expuestos al retirar la chapa del picaporte.
En todo caso siempre es conveniente comenzar por los tornillos del canto de la puerta.
- Ubicamos los tornillos del canto de la puerta que sostienen la cerradura que está montada, algunas están fijadas con tornillos de cabeza plana con ranura y otras veces con tornillos de cabeza en cruz.
Retiramos la cerradura. Si esta sale no necesitaremos destornillar más nada.

En cambio, si en tu caso, luego de quitar los tornillos del canto, la cerradura no cede, es porque hay otro tornillo sujetándola, debes ubicarlo y destornillarlo.
Paso 3, instalamos la nueva cerradura en la puerta exterior
Con el espacio libre, lo siguiente será instalar la nueva cerradura, antes de instalar el nuevo mecanismo conviene limpiar la rendija.
- Limpiamos el espacio de la cerradura y nos aseguramos de que no haya oxido, virutas de madera o de metal o algun elemento que pueda obstruir la instalación de la nueva cerradura. Suele ocurrir que, por ser cerraduras de puertas exteriores, debido a la acción de los elementos suelen tener piezas oxidadas. Para esto lo más recomendable es usar un cepillo de cerdas duras como los que se usan en herrería.
- Aplicamos grafito, después de limpiarlos es recomendable aplicar un poco de grafito en polvo en el caso de que la abertura y los espacios que ocupaban la vieja cerradura tuvieran mucho oxido. Con el grafito en polvo estaríamos retrasando un poco el proceso de oxidación de la nueva cerradura.
- Instalamos la nueva cerradura, si la cerradura nueva tiene las dimensiones exactas de la cerradura anterior no tendríamos ningún inconveniente en este paso. Todo lo que tenemos que hacer es colocarla en la abertura y asegurarnos de que encaja sin problemas.
- Atornillamos la cerradura nueva, lo mejor es usar tornillos nuevos y descartar los tornillos de la cerradura antigua, que deben estar oxidados.
- Probamos que la nueva cerradura funcione, buscamos la llave nueva y la hacemos girar para cerciorarnos de que el mecanismo funcione.

Paso 4, fijamos nuevamente el picaporte
Con la cerradura nueva en su lujar fijada y atornillada lo que nos queda es instalar el picaporte.
- Limpiamos el picaporte en caso tenga oxido y sucio lo más conveniente es limpiarlo antes de instalarlo, esto por una parte nos garantizaría mayor durabilidad de los componentes de nuestra puerta exterior y, por otra parte, por un asunto estético, que tratándose de una puerta principal tampoco debe descuidarse.
- Instalamos el picaporte, lo fijamos con sus tornillos y nos aseguramos de que funcione todo en su conjunto.
Con estos sencillos cuatro pasos hemos logrado cambiar la cerradura en una puerta exterior.

El procedimiento puede variar un poco atendiendo al modelo de puerta, pero aplicando los mismos principios básicos podrás cambiar cualquier cerradura externa sin necesidad de llamar al cerrajero.
Recomendaciones a la hora de cambiar una cerradura en puerta exterior
Algo que ocurre con mucha frecuencia a la hora de reemplazar una cerradura es que la cerradura de reemplazo tenga unas medidas distintas a la cerradura antigua.
Para evitar esto lo más recomendable es desmontar la cerradura y llevarla a la cerrajería como muestra.

Esto puede tener cierta dificultad porque se trata de una cerradura de una puerta exterior lo que, implicaría dejar la puerta expuesta.
Una alternativa es hacerle fotos con el móvil y tomar medidas.
La idea es conseguir que la nueva cerradura sea exactamente igual, al menos en las dimensiones y en la disposición de los tornillos, a la cerradura que queremos cambiar.