
No todas las puertas son iguales, por eso en esta entrada te vamos a enseñar cómo abrir una puerta de baño.
Las puertas de los baños casi siempre vienen equipadas con un mecanismo para garantizar cierta privacidad a su ocupante. Estos mecanismos de privacidad son lo suficientemente seguros como para evitar que la puerta sea abierta de improvisto. Pero tampoco son tan seguros. Por lo que en caso de emergencia siempre es posible abrirlos.
Cuando se tienen ancianos o niños en una casa estos pestillos pueden ser, en ocasiones, un dolor de cabeza. Pero usando algún consejo, un par de objetos de uso cotidiano y alguna herramienta, siempre se puede abrir la puerta de un baño.
Las puertas de los baños y los pestillos
Para abrir una puerta de baño es necesario saber qué tipo de seguro tienen. La mayoría de estas puertas vienen equipadas con:
- Pestillos de pulsar o presionar o de botón.
- Pasadores de giro.
Los pestillos de pulsar o de botón son los más comunes y se activan al presionar un botón que está en medio de la cerradura.
Por su parte los seguros de giro, que son menos comunes en las cerraduras modernas, se activan al girar el pequeño botón que se encuentra en medio del pomo.
Existe un tercer y más raro sistema de seguro muy típico de las cerraduras viejas. Estos son los seguros de empujar y girar.
Para hacer funcionar estos seguros en una puerta de baño debes cerrar la puerta, empujar el pomo hacia la chapa y girar en una dirección determinada. Para desactivar el seguro tienes que jalar el pomo hacia ti y girarlo luego en sentido contrario. Estos tienen la particularidad que en el lado que queda por fuera del baño no tiene ojo para la llave, solo un pomo.
Teniendo en cuenta esto dividiremos el tutorial en métodos que pueden funcionar según el tipo de seguro.
Comenzamos.
Cómo abrir una puerta de baño con cerradura de botón
A la hora de abrir una puerta de baño que viene equipada con un seguro de este tipo, podemos aplicar los siguientes métodos:
- Ganzúa, cuchillo o algún objeto de punta afilada
- Clip sujetapapeles
- Llave Allen.
Abriendo una puerta de baño con seguro de botón
Todos estamos familiarizados con este tipo de seguro porque es el que se encuentra en la mayoría de las cerraduras modernas de barrios residenciales usadas en interiores: baños, habitaciones.
Por esto para abrir una puerta de baño de este tipo necesitamos un objeto que quepa en el ojo de la cerradura por donde entra la llave.
Puede ser un clic fuerte al que hayamos alargado, un cuchillo puntiagudo o una llave Allen muy fina.
Lo primero es introducir nuestra herramienta en el ojo de la cerradura. Debemos hacerlo de forma recta. Una vez el objeto (bien sea clic, llave Allen, o cuchillo) esté adentro empujamos hacia adelante hasta que escuchemos un chasquido o un clic.
Cuando esto ocurre lo que sucede es que se activa el mecanismo de forma inversa. Y una pequeña barra regresa al botón de seguro a su posición de “abierto”. Por lo que si escuchamos ese clic mecánico característico de las cerraduras podemos girar el pomo y abrir la puerta.
No te frustres si no funciona con el primer intento.
En caso hayas intentado lo suficiente sin resultados y, si no recuerdas que tipo de seguro tiene la puerta de tu baño. Es muy posible que se trate de una puerta equipada con un seguro de giro.
Cómo abrir una puerta de baño que tiene un seguro de giro
Si la puerta de baño que necesitamos abrir tiene un seguro de giro debemos utilizar otro tipo de herramientas.
Lo que mejor funciona en estos casos es un destornillador de punta plana. Tiene que ser tan pequeño y tan fino que pueda entrar y salir por el ojo de la cerradura sin problemas.
- Con cuidado introduce el destornillador en el ojo del cerrojo.
- Gíralo en dirección contraria a las manecillas del reloj. Es decir de izquierda a derecha.
- Si todo ha ido bien escucharás un sonido de clic. Que es el indicador de que el seguro se ha desbloqueado. Por lo que puedes girar el pomo y abrir la puerta sin problemas.
Ten en cuenta que estos seguros son más complejos de desatascar. Intenta varias veces hasta que lo consigas. Recuerda que cuando intentas abrir una puerta debes aplicar presión y fuerza, pero debes cuidar no excederte. La fuerza bruta puede dañar el mecanismo y dificultar el proceso.
Abrir una puerta de baño con pestillo de empujar y girar
Ya vimos cómo podemos abrir una puerta de baño con los dos tipos de cerraduras más comunes. Y si has leído nuestro artículo sobre cómo abrir una puerta de hierro sin llave, habrás descubierto algunas de las técnicas habituales para abrir casi cualquier tipo de cerradura. Pero existe un tercer tipo de puerta aún más rara por estos días. Estas vienen equipadas con una cerradura que no brinda acceso a la cerradura desde afuera.
Sí, tal como lo lees, por fuera del baño lo único que tenemos es un pomo y ningún acceso al sistema de desbloqueo.
Por eso para abrir una puerta de este tipo utilizaremos otro tipo de tecnicas y herramientas.
Lo que mejor funciona en estos casos es el forzar el pestillo o resbalón. Para la cual podemos ocupar:
- Radiografías
- Tarjetas de crédito
- Un cuchillo de mantequilla
- O un pedazo de plástico de alguna botella de refresco o un bote de helado.
Consigue una pieza de un material flexible que pueda caber por el intersticio que hay entre la puerta y el marco. Una tarjeta de crédito funcionaría. Pero lo mejor es una radiografía o una sección de plástico sacado de una botella de gaseosa o bote de helado.
Introduce la herramienta plástica de tu preferencia en la hendidura que separa al marco de la puerta. Deslízalo con fuerza en dirección a la cerradura hasta dar con el pestillo o resbalón. En ocasiones las puertas se abren en el primer intento pero no desistas si no funciona con los primeros empujones.
En estos casos una lámina radiografía es lo más recomendable pues nos permite mayor alcance y maniobrabilidad.